quien corta el bacalao dice,

Linda repercusión ha tenido hasta ahora lo que se hereda no se roba. Tal vez porque trata un tema milenario rara vez discutido en los círculos, que casualmente en este tiempo ha estado en boga; quizá por la problemática que presenta la relación sobresaliente del relato (esto deducido luego de minuciosas observaciones en los más diversos espíritus); por qué no por una treta del destino.
Los susceptibles del lenguaje esgrimirán que, técnicamente la polvareda no la levanta lo que se hereda no se roba en sí. Los tres primeros comentarios que por él surgieron contienen palabras que no hacen referencia alguna a la historia desgarradora de esa madre que -a priori- abandona a su hijo. Estos delicaditos de la rigurosidad hablarán de entornos, de algo que subyace, de efectos colaterales, de lo inesperado. Yo, que corto bacalao todo el día, digo que estos exquisitos del texto son un séquito de infelices, incapaces de desviarse de la norma, de lo peor que pueda haber. Pero tienen razón.
Lo inesperado, esa gamberrada que me lacró el destino fue que un par de infrahumanos -a priori- haya dado a parar con este espacio; inesperado e inexplicable es que esta gente haya sido capaz de elaborar oraciones con cierto sentido lógico. Pero claro, sobre qué otra cosa pueden explayarse que no sea sobre sus vidas, sus contrariedades, sus gobiernos, sus experiencias, sus pueblos, sus sus. Esto, por más que el título diga otra cosa es el sabor que deja el comentario, parte III.
De entrada nomás, quiero no soslayar que aquella muchacha agradable a quien la vida ha golpeado duramente, que hace mucho no aparece por acá, queda excluida de todos los conceptos que a continuación vertiré sobre la gente de Trenque Lauquen. Especialmente sobre dos gentes: un tal Filiberto García Andrade y Anónimo. Chiquitina, seguro leíste las palabras de tus coterráneos y arrancaste derechito al baño, tal vez para acompañar a tu padre de una vez o para vomitar tu último sólido ingerido, luego del asco que te causó leer aquello, a lo que no dabas crédito. Bueno, a lo nuestro...
La expectativa por esta tercera entrega comenzó a palparse luego de visto el primer comentario. Pagaba 1,15 que se venía. Con el segundo y tercero el dividendo disminuyó. Pero yo nunca fui favorito en nada, por eso no me los fumo, como a Tuana el favorito. Prefiero dar el batacazo, la sorpresa, aunque ésta sea una monja alojada en un establecimiento de reclusión. Las vías de lo impredecible me seducen, que nadie espere algo de mí me hace creerme inefable; por esto lo que se viene.
No habrá palabras de admiración para estos sujetos, típicas de la sección el sabor que deja el comentario. Todo lo contrario. Quisiera encontrar los adjetivos más descalificativos para describir estas gentes, pero ni ganas tengo. Usar este espacio prestigioso para la denuncia, el chimento, las amenazas, el puterío barato... encima circunscripto a ¡Trenque Lauquen! ¿Trenque Lauquen? Sí, Trenque Lauquen, vaya a saber uno dónde queda. Seguro en Argentina, por las ínfulas de superioridad que adornan esas palabras.
Primero Anónimo, contando sus experiencias cuando joven, de carrera sindical, de chuletas, de Faso, de alucinógenos y no sé qué cantidad de porquerías más, para allá en el final hacer una mísera reseña sobre el relato que presuntamente había leído y que se identificaba y bla bla bla. Mijito, este espacio jamás va a ayudarte. A contar las penas al cuartito o a llorar al psicólogo.
Después este tal Filiberto (¡qué nombre!), que en tres frases expuso lo peor que un ser humano puede tener: redundancias, lugares comunes, palabras inventadas (¿ignomia?), aberrante sintaxis, ideas ininteligibles, formalismos, confesar que tiene muchos años (desnudando la pedantería por la experiencia), tratar a la vida de compañera... Filiberto, que seguro sos algo de Filipauskas, no sigo porque mi intención no es degradar a nadie, pero firmar con los dos apellidos cuando ni cerca es compuesto... mmm.
El tercer comentario (y desenlace) es antológico. Anónimo nuevamente, esta vez para recontra cagar a puteadas al pobre de Fili, que simplemente había dejado unas líneas ingenuas explicando que su anonimato, que la lucha, la cara, la compañera. Seguro le erró de blog, pobre Fili, pero no vamos a condenarlo por ser un subnormal. Como a vos tampoco Anoni, que por más que tengas un trastorno psíquico bastante elocuente que hace que desprecies tus propias palabras antes escritas, nadie va a cruzar de vereda cuando te vean en la calle. La personalidad múltiple es común en estas latitudes. Es fruto del consumo desmedido de estupefacientes de pésima calidad en la etapa pueril y adolescente: la ingesta de Lucindescai debe ser lo único cierto de toda tu perorata. Es usual que quieras confesarlo en cualquier medio sin importar cuál; de ahí tu aparición en este espacio, infame.
la victimización (o quien corta el bacalao) te aconseja que te trates Filiberto García Andrade, Anónimo o como quieras llamarte cuando leas esto (sospecho que también sos la menor de Trenque Lauquen). Conozco especialistas vecinos, míos, y tuyos también. Cualquier infanto se daría cuenta que sos de acá nomás, de la esquina, de esta ciudad, que somos tres. Trenque Lauquen es un nombre muy sofisticado para que exista, menos posible es que seas oriundo/a de ahí. Para la próxima te recomiendo Valle del Verdún, Caleta Olivia, Remedios de Escalada, Budge, Pachencho Romero, Río Cuarto, Atilio Paiva, Sebastián Paiva o Jesucristo de los Santos de los últimos días.

1 comentario:

Anónimo dijo...

El sabor que deja la X:
Orquesta Típica Fernández Fierro -- ¿Qué le sucede al cantante? El tipo se pasó gritando: mucha mierda Fernández Fierro!!! sin parar cada vez que terminaba un tema, agitó a un pibito (que no tenía mas de 14) por subirse al vallado que lo separaba del escenario, incluso usando la palabra "puto", y la remató tirando dos discos a la marchanta.
La Mufa: Correctos. El peludo que tocaba el bandoneón se calentó con el de la camioneta que le prendió la música cerca.
Skay Beilinson – LADRI!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! No podés hacer sólo 16 temas, y de ellos únicamente 3 del grupito que te salvó de las 8 Oribes: el Snifer, el guacho de entre los palos y risita latín (pogo inenarrable; lejos lo mejor de la noche).
La Triple Nelson: Pude presenciar solamente 2 temas. Me hicieron salir corriendo pues empezaba…
El Vivo de León -- Demagogo hijo de re mil puta. Te cagaron a chiflidos cuando hablaste de las papeleras, después arrugaste, garca. No robes más con los desaparecidos. Renovate. ¿Tus temas son todos hits? ¿Tus hits son todos tus temas? Chupamelá.
El Congo – Enorme arranque: los primeros 4 o 5 minutos del recital (¿¿recital metí??) fueron demoledores. Intercalaron 10 o 12 canciones, es decir, la introducción de un tema enganchada con la intro de otro y así en cadena. ¿El resto? Quedó por esa.
Carpa Rastafari: Álvaro Gaynicotche: Dedicate a los dientes, coleguita del Burdín grande. Llegué para ver el final de tu presentación porque dije ah tá este pelado al final se va a pasar terrible videíto inédito y va a tirar toda la data, y cerrás con el video clip de…… REDEMPTION SONG!!!!!!!!????????!!!!!!! HIJO DE PUTA!!!!! Y encima después pasás el chivo del programita de la radio. Que raro que no me vendiste ningún póster. Chupamelá para vos también.
4 Pesos de Propina: Me da vergüenza realizar comentario.
Buitres: Presencié sólo un tema; toca buitres y si muero hoy bla bla bla. La rompí.
Abuela Coca: Abueliiiiitaaaaaa adentro que se me va a resfriar. 1 tema y medio y a la camita. Los corrió el agua. El Black Marrón se baño por primera vez en el año.
Loquillo & The Trogloditas: Gracias por venir Gaita. Arriba loco, la rompiste. Apurate que empieza Málaga - Sporting de Gijón. Chau loco, saludos al papito del Nacho, el Horacio.

Personaje de la noche: El padre de Tiziano Olivetto.